ZP autoriza la comisión de delitos.
El PP califica como ilegal la reunión PSOE-ETA (Batasuna) anunciada por Patxi López
Rajoy anuncia en la COPE que si se produce la reunión el PP romperá "cualquier tipo de apoyo al Gobierno".
- ZP está "rompiendo todas las reglas del juego"
- Niega cualquier pacto con el PSOE en el Debate sobre el estado de la Nación
- La reunión misma ya "supone el reconocimiento político" de la organización terrorista
- "El título octavo de la Constitución ya no está en vigor"
- "Yo no he encargado ningún dictamen... voy a poner un recurso ante el Tribunal Constitucional"
- "Yo no creo en las revoluciones"
- "El Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo ya lo liquidó el Presidente del Gobierno"
- "Ha sido el Gobierno el que no ha querido entenderse con el PP... no hay mayor incumplimiento que este"
- No descarta presentar una denuncia ante la Audiencia Nacional
Volviendo al gravísimo suceso acontecido ayer:
ZP, ese mentiroso, ha venido a afirmar ayer "la ley soy yo" y le ha pegado una patada a todo nuestro sistema jurídico. Se acabó el derecho.
Mariano Rajoy ha afirmado hace unos momentos en COPE que los dirigentes del PSOE deben ser citados por los Tribunales si se reunen con la organización terrorista y ha anunciado que el PP no va a apoyar al Gobierno en su locura totalitaria. Ni que decir tiene que da por liquidado el Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo.
Independientemente de que se produzca o no dicha reunión, avalada desde el martes por la Moncloa, no encontramos ante un Presidente del Gobierno totalitario que ayer ha colocado una bomba lapa en los bajos del Estado de Derecho.
Hablando en plata: ZP traspasó ayer la raya que separa al presidente del tirano. La quiebra de la legitimidad en el ejercicio del poder se ha producido.
Esto, nosotros, los ciudadanos de a pie, no lo podemos consentir. A menos que queramos preguntarnos camino de la checa cómo fue posible llegar a ella.
Es, además, un deber de la oposición la vertebración de un movimiento social que aune a cuántos desean vivir en un Estado de Derecho -socialistas, intervencionistas o liberales-. Que somos mayoría.
La anécdota: hasta El País se cabrea.
Rajoy anuncia en la COPE que si se produce la reunión el PP romperá "cualquier tipo de apoyo al Gobierno".
- ZP está "rompiendo todas las reglas del juego"
- Niega cualquier pacto con el PSOE en el Debate sobre el estado de la Nación
- La reunión misma ya "supone el reconocimiento político" de la organización terrorista
- "El título octavo de la Constitución ya no está en vigor"
- "Yo no he encargado ningún dictamen... voy a poner un recurso ante el Tribunal Constitucional"
- "Yo no creo en las revoluciones"
- "El Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo ya lo liquidó el Presidente del Gobierno"
- "Ha sido el Gobierno el que no ha querido entenderse con el PP... no hay mayor incumplimiento que este"
- No descarta presentar una denuncia ante la Audiencia Nacional
Volviendo al gravísimo suceso acontecido ayer:
ZP, ese mentiroso, ha venido a afirmar ayer "la ley soy yo" y le ha pegado una patada a todo nuestro sistema jurídico. Se acabó el derecho.
Mariano Rajoy ha afirmado hace unos momentos en COPE que los dirigentes del PSOE deben ser citados por los Tribunales si se reunen con la organización terrorista y ha anunciado que el PP no va a apoyar al Gobierno en su locura totalitaria. Ni que decir tiene que da por liquidado el Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo.
Independientemente de que se produzca o no dicha reunión, avalada desde el martes por la Moncloa, no encontramos ante un Presidente del Gobierno totalitario que ayer ha colocado una bomba lapa en los bajos del Estado de Derecho.
Hablando en plata: ZP traspasó ayer la raya que separa al presidente del tirano. La quiebra de la legitimidad en el ejercicio del poder se ha producido.
Esto, nosotros, los ciudadanos de a pie, no lo podemos consentir. A menos que queramos preguntarnos camino de la checa cómo fue posible llegar a ella.
Es, además, un deber de la oposición la vertebración de un movimiento social que aune a cuántos desean vivir en un Estado de Derecho -socialistas, intervencionistas o liberales-. Que somos mayoría.
La anécdota: hasta El País se cabrea.