"Creo que en cualquier época yo habría amado la libertad, pero en los tiempos que corren me inclino a adorarla" (Alexis de Tocqueville)

lunes, junio 18, 2007

Nacionalismo-socialismo: Sigue la negociación con ETA, la persecución a las víctimas y el intento de destrucción, por vía de separación, de la derecha

El Ministerio del Interior que dirige el que fuera portavoz del Gobierno de los GAL acaba de ordenar que se dificulten las condiciones a la AVT para acceder a ayudas públicas. Eso al mismo tiempo en que ETA volverá a recibir dinero de todos los contribuyentes. Para que se note con quién están los de la Pesoe. Quiénes son los buenos (ANV) y quiénes los malos (las víctimas de ETA). Eso por un lado.

Por otro, ayer el batasuno Barrena lo dejó bien claro: la negociación sigue. Pese a los atentados mortales que vaya a cometer la banda. Pase lo que pasa. Tampoco es que esto sea algo novedoso ni sorprendente. Al fin y al cabo, entre los años 2002 y 2004, los socialistas se iban de copichuelas con los batasunos, mientras más de veinte inocentes caían asesinados. Al fin y al cabo, como este año íbamos a estar mejor que el pasado, ZP siguió erre que erre tras el atentado mortal de la T-4. Al fin y al cabo, de izquierdas todos. Igual de cantado está esto como que entregarán Navarra a los separatistas. Y ya se habla de que Eguiguren podría haber pedido la mediación de Carod (vuelta al comienzo en Perpignan) y que un socialista podría haber estado de copitas con Olano.

En realidad al gobierno de ZP (por cierto, todo esto tiene demasiada enjundia para el bobo ZP y el límite Pepiño) y a la Monarquía que consiente (anda ahora, para bochorno de todos muy entretenida otorgando la mayor distinción posible, el Toisón de oro, al dictador y sátrapa de Arabia Saudí. Dárselo a Vaclav Hável o a cualquier luchador por la libertad es algo que al Borbón no le interesa...) no les queda otra, puesto que, una vez demostrado que la derecha puede gobernar con mayoría absoluta y saliéndose del consenso socialdemócrata impuesto desde 1978, todo el proyecto político del PSOE pasa por una segunda transición cuyo objetivo es expulsar al Partido Popular del Estado de Partidos -el Estado de Derecho no existe en España. Y el que lo niegue que se lea la Ley del Consejo General del Poder Judicial de 1985- e incluir en el llamado consenso (que no fue más que la entrega de la nación a la izquierda y a los nacionalismos) a la ETA, previamente blanqueada gracias a serviles medios de comunicación -casi todos- y a las mentiras masivas que se repiten día sí, día también.

Y gracias también a ciertos sectores de la derecha. Esos que en sus discursos afirman encantados, mientras los borregos que van camino del matadero sonríen felkices por la cantidad de gasto público prometido -a ver si cae algo, pensarán los inconscientes-, que los ciudadanos han de notar la presencia de las administraciones públicas a cada paso que dan. Esos que afirman ser los campeones del centro, cuando no son más que siervos del nacionalismo o del socialismo. O esos que andan de rodillas ante el nacionalismo desintegrador. O esos que se lucen con sus fichajes electorales. Fichajes que posiblemente sean la causa de que se vayan al bien merecido paro.

Y el que no se de cuenta de esto es porque no quiere. Prefiere vivir en sus mundos de fantasía. Tampoco es novedad. Ha sucedido muchas veces en muchos lugares del mundo. Y siempre ha acabado igual. Muchos son los borregos que, camino del matadero, se preguntan cómo ha sido posible. Ciegos hasta el final.

Además

Interesante crítica a la derecha desde la derecha de Antonio Arcones, de la Fundación Burke, ligada a American Review

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