Carta de un guipuzcoano
Reproduzco esta carta que me ha llegado:
Carta de un Guipuzcoano. (no da su nombre por razones evidentes)
600.000 VÍCTIMAS DEL NACIONALISMO
Estimad@ amig@:
Para entender y compartir la importancia de este escrito y, en consecuencia, para que atiendas nuestra petición de auxilio, tan sólo has de perder unos minutos de tu tiempo y leer atentamente estas líneas. Después, si lo estimas razonable, te rogamos que colabores con nosotros en la medida de tus posibilidades. Tu apoyo, gracias al potencial de las nuevas tecnologías de la comunicación, además de sencillo de ejecución puede ser muy fructífero.
No importa que seas de izquierdas, de derechas o apolítico; cuando tratamos de este importante asunto, la defensa de la Libertad, todos navegamos en el mismo bergantín.
Desde hace veinticinco años, la Constitución española representa la máxima garantía de que tú y yo seamos libres e iguales en derechos y deberes.Lamentablemente, este feliz lapso de tiempo, muy provechoso política y socialmente para nuestro país, no ha transcurrido del mismo modo en todos los rincones de España. Algo tan fundamental y deseable como el respeto a los derechos constitucionales de las personas, el respeto a sus libertades, ha estado ausente en el País Vasco.
Existen aproximadamente 600.000 personas, vascos votantes constitucionalistas y con sentimiento de pertenencia a la patria común que es España, que padecen en distinta medida (dependiendo de cuánto quieran complicarse la vida implicándose en asuntos políticos o socioculturales) un brutal acoso del cual son directa o indirectamente responsables las autoridades autonómicas vascas, es decir, los partidos naZionalistas que han gobernado ininterrumpidamente desde la dictadura.
En los últimos 25 años, 200.000 vascos se han ido de su tierra. Es cierto que no todos ellos han sido empujados por la limpieza étnica "suavemente" ejercida por el nacionalismo (amenazas, incapacitación laboral, boicot), pero son muchos miles los que atestiguan que la vida en el País Vasco se les llegó a hacer insufrible, siendo esa la razón de que abandonaron su bella tierra natal o de acogida.
Además del acoso político y terrorista (asesinatos, amenazas, palizas, extorsiones, incendios provocados, explosiones), miles de personas han padecido un auténtico calvario en el ámbito lingüístico y cultural. Los nacionalistas han utilizado una de las dos lenguas autóctonas (el euskera)para expulsar de la enseñanza- y romperles la vida- a miles de buenos maestros que no han podido aprender una lengua arcaica y endiabladamente difícil. El mismo camino habrán de seguir los médicos, los dependientes de los comercios, etc.
Estas personas han sido tratadas como extranjeros en su propia tierra. Los nacionalistas han logrado impedir el acceso al empleo público a más de la mitad de la población vasca por el mismo motivo, por la cuestión lingüística. Los nacionalistas también han logrado que la lengua española prácticamente haya desaparecido de la enseñanza pública primaria y, a no mucho tardar, de la secundaria, pese al deseo de miles y miles de ciudadanos no nacionalistas (un derecho amparado en teoría por nuestra Constitución) de que sus hijos estudien en la lengua castellana.
Al apoderarse de la enseñanza, el nacionalismo ha dictado que en muchos colegios se enseñe a los niños cuál es su verdadera y única patria: Euskalerria, una nación ficticia de siete provincias (incluída Navarra a su pesar) dividida y ocupada por dos naciones opresoras (España y Francia). En Guipúzcoa, por ejemplo, es imposible adquirir un mapa homologado de la Comunidad Autónoma Vasca. No existen esos mapas sencillamente porque no se editan. Tan sólo existen los mapas nacionalistas, los de la patria utópica con sus siete provincias.
¿No es lógico que, con este tipo de enseñanza, aparezcan terroristas para "liberar a su patria" hasta debajo de las piedras? Sucesivos gobiernos españoles, de izquierdas y de derechas, han consentido este horrible estado de cosas, este imperio de la ilegalidad y de la ignominia, pues temían que las iniciativas gubernamentales drásticas no habrían contado con la aprobación de Europa. Esos gobiernos han denegado su auxilio a sus súbditos vascos no nacionalistas por puro "miedo escénico". Los nacionalistas gozan de un poder político casi total en el País Vasco, hasta el punto de que no temen violar sistemáticamente la Constitución, el símbolo de nuestros derechos cívicos, seguros de la impunidad de sus actos. Ignoran los símbolos constitucionales, desprecian los procedimentos legales, incumplen mil y una leyes, se apoyan en grupos filoterroristas para gobernar....
Los nacionalistas apoyaron el nombramiento de Josu Ternera, etarra en busca y captura, para la Comisión de Derechos Humanos del parlamento vasco. Esa fue la más cruel y aberrante de todas las charlotadas peneuvistas.
La policía autonómica siempre ha seguido las directrices del poder político autonómico y hoy es el día en que podemos afirmar que SÓLO LAS FUERZAS DEL ORDEN ESPAÑOLAS HAN ARRINCONADO A ETA, frente la inoperancia, desidia y obstruccionismo de los mandos policiales autonómicos. Tan sólo hay que comparar el historial de capturas de los distintos cuerpos policiales para constatar que la trayectoria de la ertzaintza es una trayectoria vergonzante, y ello debido a motivaciones políticas.
Si quieres leer testimonios de auténticos ertzainas denunciando aquellos episodios sonrojantes, dirígete a la web de Basta Ya o a www.paralalibertad.org.
¿POR QUÉ QUIEREN LOS nacionalistas MÁS INDEPENDENCIA? ¿Por qué han apostado- aprovechándose de la ignorancia y el bien cultivado fanatismo de sus votantes que jamás les retirarán su apoyo- por el famoso "plan Ibarretxe"? Porque buscan EL PODER ABSOLUTO.
Un poder ejercido sin ningún tipo de limitación que pudiera establecer el gobierno de España. Un poder gracias al cual, AL FIN, podrán indultar a los "mártires" de la ansiada independencia vasca (los etarras).
Un poder en virtud del cual podrán suprimir definitivamente de los libros de texto en las escuelas cualquier alusión a nuestra historia (la historia de España) como una historia compartida.
Con el PODER ABSOLUTO podrán AL FIN poner un plazo para la extinción de la lengua española, una lengua que ha estado presente durante siglos en tierras vascas y que tiene históricamente derecho a seguir presente en las mismas condiciones que la otra, el euskera. El objetivo real de los nacionalistas es que el español pase a ser una lengua extranjera de aprendizaje "recomendable", como ocurre con el inglés en la enseñanza secundaria.
Con el PODER ABSOLUTO sojuzgarán políticamente a los 600.000 ciudadanos constitucionalistas activos. Les declararán residentes de segunda categoría si pretenden mantener su españolidad, en palabras del propio Arzallus.
Como dijo recientemente Joseba Eguíbar, portavoz del PNV, quien no esté de acuerdo con el plan Ibarretxe no es genuínamente vasco, luego no será acreedor a los derechos que porte la futura nacionalidad vasca.
Como puedes comprobar, esto es nazismo en estado puro. Además de esta triste historia, constatable, que te hemos contado, habrás comprobado que tu país, España, se está convirtiendo en un reino de taifas donde prima la insolidaridad, el desprecio al vecino pobre, el cainismo... cuando la nuestra podría ser una democracia de la talla de la francesa, la inglesa o la alemana.
¿CÓMO PUEDES TÚ AYUDAR a los constitucionalistas vascos frente al nacionalismo cainita, y de paso favorecer a la patria común de todos los ciudadanos libres?
1. Nuestra Constitución descansa en los principios proclamados por la Revolución Francesa: Libertad, Igualdad y Fraternidad. ES TU CONSTITUCIÓN Y GARANTIZA TU LIBERTAD Y LA LIBERTAD DE TUS COMPATRIOTAS. No permitas que sea modificada para favorecer a los nacionalismos. LOS NACIONALISMOS NO TIENEN NINGÚN INTERÉS EN MEJORARLA. Como ha quedado patente, tan sólo desean que la Constitución desaparezca de los territorios que ellos gobiernan... para poder realizar su labor caciquil con total despotismo. NO LO CONSIENTAS. Exige a tu partido TOLERANCIA CERO con los nacionalismos secesionistas, o, EN CASO CONTRARIO, CAMBIA DE OPCIÓN POLÍTICA aunque sea de forma excepcional. Ni una sola concesión. Ni una sola modificación constitucional para favorecer a quien, dentro de su propio cortijo, mortifica a sus propios compatriotas, como hace el nacionalismo. Ya habrá tiempo de volver a votar con el corazón. Ahora hazlo con el cerebro. Ayuda a los vascos oprimidos y ayuda a tu propio país.
2. Nuestra patria NO ES UNA BANDERA O UN TERRITORIO. Nuestra patria es la libertad de todos, garantizada por escrito en la Constitución. Las otras patrias no deben interesarte. Las otras patrias no valen una mierda. Y si alguna vez España no contara con una Carta Magna inspirada en el liberalismo ilustrado heredero de la Revolución Francesa, entonces te recomendaremos que reniegues de tu españolidad. Así de claro.
3. Difunde este escrito todo cuanto te sea posible. Envíalo a todos tus contactos vía correo electrónico y ruégales que hagan lo propio, que lo difundan. Con este simple gesto estarás ayudando a que, algún día no muy lejano, este país recupere la cordura, el orgullo y el talante solidario.
Recibe un fuerte abrazo.
(Un guipuzcoano)