Los nihilistas, desesperados
Y hubo "fumata bianca". Y apareció en el balcón Joseph Ratzinger, ahora ya Benedicto XVI.
Pues a los nihilistas que pululan por España les ha puesto el asunto al borde de un ataque de nervios almodovariano. Lean algunas reacciones.
José Saramago: "La Inquisición ha subido al poder", por lo que pidió: "Dios me acuda con el nuevo Papa".
Iñaki Anasagasti: "Para el 'aggiornamiento' y el rejuvenecimiento de la Iglesia, para hacerla mucho más participativa, más colegiada y menos dogmática, no es una buena noticia".
Gaspar Llamazares (insuperable como teólogo): "Se ha visto que se puede ser más papista que el Papa, y es que Joseph Ratzinger viene de ser martillo de herejes. Se puede decir aquello de que siempre se puede estar peor". "El Espíritu Santo también se puede equivocar". "Es el Papa de la curia y de la burocracia vaticana". Su doctrina conservadora le alejará de "buena parte de los cambios que se producen en la sociedad, también en términos de derechos individuales o de la mujer (...) la jerarquía eclesiástica se equivoca frente a estos retos".
Beatriz Gimeno, presidenta de la Federación Españóla de Lesbianas, Gays y Transexuales: "Es una mala noticia para los millones de homosexuales católicos porque mantendrá a la Iglesia en unas posiciones superconservadoras contra este colectivo"
Manuel Chaves, Presidente del PSOE, tiene la impresión de que la elección ha producido "bastante decepción" porque tiene un carácter "conservador" desde el punto de vista doctrinal.
David Álvarez, presidente de la Coordinadora de ONG de Desarrollo: pide al nuevo Papa que "sea más flexible, más permisivo con el uso del preservativo para poder frenar esa gran pandemia que es el sida y los problemas del Tercer Mundo (...)
Igual es que se pensaban que desde PRISA o desde la Internacional Socialista podrían nombrar Papa o algo por el estilo. Todo lo interpretan en clave política y siguiendo parámetros políticos. Y claro, así de bien que patinan. Porque no tienen ni idea.
Jiménez Losantos publica un magistral artículo hoy en Libertad Digital al respecto.
"Conservador", "reaccionario", "ortodoxo", incluso hay quién osa tachar al nuevo Papa nada menos que de nazi. Los progres nos recuerdan desde sus púlpitos que el Papa perteneció a las juventudes hitlerianas, por impertivo legal a la edad de 12 años. Callan que se pasó a la resistencia en cuanto tuvo ocasión.
Juegan a vaticinar, además, cuántos años vivirá. Su esperanza es que viva poco, claro.
Y sufren mucho porque dicen que la Iglesia perderá fieles con esta elección. Pues como pierda los mismos que durante el pontificado de Juan Pablo II, donde de 756 millones de fieles se pasó a 1.100, igual les da un patatús. No entiendo yo muy bien qué puede importar a un ateo o agnóstico cuántos fieles tenga la Iglesia. ¿A ellos qué más les da?
Y algún bloguero se ha montado una teoría alucinante. A éste lo deberían fichar como comentarista religioso de Crónicas Marcianas, pero ya.
En fin, que es divertidísimo ver a la jauría de intelectuales progres analizar un Cónclave y una elección papal. Desde luego, con análisis como estos, nos pueden ahorrar las teleseries de humor. Es impagable.
Benedicto XVI: " Una fé adulta no sigue las normas de las modas y las corrientes"
Más: "La más grave intolerancia es la exclusión de la verdad"
Y estos son los que ahora usarán como altavoces a tveplus o a PRISA para atacar al nuevo Papa.
