Erre que erre...
Erre que erre con las ya clásicas leyendas marxistas del tipo "desigualdades económicas", "capitalismo salvaje", "distribución de la riqueza injusta" y la variación "injusticia universal" de corte zapateril, cursi y poco original; todas ellas redescubiertas como causantes de esta vorágine de atentados terroristas.
La masa progresista, haciendo de poste de repetición, extiende a la sociedad española los discursos del líder de la secta prisaica, que sigue empeñado en echar las culpas de todo los males al neoliberalismo, es decir, intervencionismo, y a la globalización, esto es, intervencionismo globalizado. Sepan el líder y sus seguidores, que gracias a los valores que defiende el "neoliberalismo", sus medios son consumidos en masa por la población, gracias a la maldita economía de mercado, el líder puede extender su mensaje nihilista, y que otra vez más, gracias al capitalismo, el líder sigue acumulando dinero y poder, que es lo que realmente le interesa.
Coño, líder, no tire torpedos a la línea de flotación de su tinglado, que se le va a ir al carajo la gallina de los huevos de oro, y si realmente odia usted tanto el capitalismo, pues predique con el ejemplo y venda todas sus acciones, liquide su grupo de comunicación, o regáleselo a una ONG de estas que pasaban por alli...